lunes, 25 de abril de 2011

Un tiempo de pausa

He buscado la excusa de entrar en mi abandonado blog para parar un rato del zafarrancho de limpieza en el que estoy metida.


Sí, esa ingrata tarea, inútil como inversión ya que nunca retorna ni el tiempo ni el esfuerzo invertido pero necesaria, según dicen, para mantener la salud y el bienestar. Buffff....

Pero aquí estoy de vuelta de mis mini vacaciones leonesas; minis en tiempo, maxis en sentimientos, como siempre que escapo de mis rutinas para compartir vida, risas, caminos y paisajes con mis amigos.


Le decía a una amiga que la vida sólo contiene momentos felices, pequeños trozos enmarcados en un tiempo - espacio reducido que hay que aprovechar al máximo viviéndolos como si fueran los últimos.


Y así hemos vivido 18 horas al día durante 4 días (algunos han tenido un poco más de suerte...).


Mi vida es un poco mejor ahora.



1 comentario:

Susana dijo...

Gente auténticamente generosa me ha enseñado el verdadero significado de la generosidad: tomar conciencia de lo que se tiene, dar gracias y compartir sin esperar nada a cambio.No compras lealtades,no compras persones, no esperas nada, solo das.Siempre hay algo positivo por lo que te alegras, a lo que agarrarse y lo que te da fuerza. Un beso